No hay más que ver a Vodafone, con sus nuevos productos (Vodafone en tu casa, Internet) con los que entra en campos que, hasta el momento, “no le correspondían” y con sus agresivas campañas de comunicación. Ahora mismo, con la campaña “Sinceramente tuyos” se convierte en la primera compañía que hace un esfuerzo palpable por la fidelización, y no sólo con engañosos programas de puntos o campañas temporales.
Casualmente, esta buena campaña de Vodafone coincide con una nefasta política de empresa y de comunicación de Telefónica: cobran el identificador de llamadas, dejan de incluir planes de ahorro en los mínimos mensuales, realizan campañas de publicidad lamentables y, encima, ceden uno de sus grandes poderes en la calle al rival más directo y que se está haciendo más fuerte.
Muchas de las identificativas cabinas de Telefónica han pasado a tener publicidad de Vodafone. Sin bien eso puede no ser grave del todo, porque al fin y al cabo cobrarán por ello un buen dinero. Pero lo que no me parece aceptable es permitir que Vodafone, tu competencia más directa, tape con su imagen corporativa toda una cabina, que antes era identificable de Telefónica y ahora ya da la sensación de que sea de Vodafone.
Además, como la cabina “disfrazada” de Vodafone es más reciente, comparada con la que aún viste de Telefónica está más limpia y bonita, no sé si será casualidad, o producto de buenas políticas contra malas políticas, pero muchas cabinas están alternadas, una de Vodafone limpia y nueva, una de Telefónica sucia y fea.
1 comentario:
Yo no he visto ninguna cabina de "Vodafone", pero seguro que haberlas haylas...
Como las máquinas de vender Actimel.
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